Na “entrada” publicada neste Blog o pasado
27 de xaneiro daba conta do debate celebrado na Deputación Permanente do
Congreso no que o Grupo Parlamentario de CiU interesaba a comparecencia da
ministra de Fomento, Ana Pastor, para que comparecese de forma extraordinaria
na Cámara e así explicar as prioridades do Goberno en materia ferroviaria e os
plans de liberalización.
Na súa intervención o deputado
catalán Pere Macías (CiU) dixo literalmente :
“Hace pocos días la ministra hizo
público que este año van a entrar en servicio 1.000 kilómetros más de líneas de
alta velocidad. Pues bien, simultáneamente a este anuncio por parte de
la ministra de Fomento de ampliar en 1.000 kilómetros las líneas de alta
velocidad del Estado español se han conocido dos informes, uno del
Tribunal de Cuentas del Estado francés y otro del organismo paralelo de
Portugal, que son severamente críticos con la rentabilidad de las líneas de
alta velocidad. En el caso de Portugal, este dictamen es preventivo,
puesto que lo que hace es evitar que se empiece la construcción de la línea
desde Lisboa hasta la frontera camino de Madrid. Por suerte, nuestros
vecinos portugueses han podido evitar incurrir en un gravísimo error. Y en
Francia, un país donde las líneas de alta velocidad tienen una densidad de
pasajeros cinco veces superior a la densidad de las líneas de alta velocidad
españolas, su Tribunal de Cuentas ha hecho un dictamen —está en la web e invito
a todas las señoras y señores diputados a que lo analicen— severamente
crítico con la rentabilidad económica y social de las líneas de alta velocidad.
A pesar de ello, la principal obra del Gobierno del Partido Popular en
relación con las infraestructuras sigue siendo la inversión en ferrocarril de
alta velocidad. No consiste simplemente en decir que vamos a
construir y a tener líneas, sino que tienen que operar y hay que mantenerlas,
y lógicamente va a existir una presión sobre dos empresas públicas, Renfe y
ADIF, esta última severamente endeudada. Ya no vamos a poder endeudar
más a ADIF porque la legislatura acaba este año y el año que viene Dios
proveerá. Por tanto, quien gobierne España el año que viene se verá
ante la necesidad de recapitalizar muy severamente una empresa absolutamente
descapitalizada. Por otra parte, las pérdidas de la operadora Renfe siguen
creciendo, a pesar de algunas mejoras de gestión que hay que reconocer pero que
no pueden llegar a la cuenta de resultados porque cada año se sube el canon que
tiene que pagar ADIF. ¿Para qué? Para que ADIF pueda seguir endeudándose. Esta
es una falta de visión de futuro extraordinaria que —repito— a corto plazo va a
acabar con la necesidad de que tanto ADIF como Renfe deban ser recapitalizadas
o, dependiendo de quien gobierne, vendidas rápidamente y siempre que hay que
vender rápido uno vende mal. Nos parece, pues, que es una actuación de una
gravísima irresponsabilidad. Hay que anunciarla preventivamente y hacer
acudir cuanto antes a la señora ministra a esta Cámara.
Paralelamente a esta
inversión en alta velocidad se han abandonado las cercanías. En Cataluña esto es gravísimo por la
desinversión crónica y en Madrid, que llegó a tener los mejores
servicios de cercanías de Europa, empieza a haber problemas por la ya también
crónica falta de inversión. Se han abandonado las cercanías y no hablemos ya
del transporte de mercancías por ferrocarril, en relación con lo cual hay que
destacar la actuación absolutamente vergonzosa del Gobierno del Partido
Popular, que no hace más que llevar a la agonía a este segmento. El último
anuncio es el de vender lo poco que quede de Renfe-Mercancías. Así, pues, es
urgentísima la comparecencia de la señora ministra para hablar sobre las
prioridades del Gobierno en materia ferroviaria, ya que su actuación va a tener
severísimas consecuencias en el futuro. Lean ustedes lo que sucedió en Japón en
el año 1987: colapso del sistema ferroviario, que obligó a su troceamiento y
privatización. Aviso para navegantes.”
No meu turno de réplica dixen
literalmente:
“Respecto al transporte ferroviario,
petición que han defendido varios portavoces, en primer lugar el señor
Macias, me he quedado bastante perplejo cuando se pone en cuestión la
alta velocidad en nuestro país y el desarrollo de nuevas líneas de alta
velocidad cuando el territorio al que pertenece el señor Macias ya
dispone de la alta velocidad, cuando las inversiones del Estado en su conjunto
para hacer esa justísima y necesaria llegada de la alta velocidad a
Cataluña y su prolongación a la frontera francesa ya
están hechas.
Parece que se quiere
defender nuevamente el modelo de una doble condición: los españoles de primera, que tienen derecho a unas
buenas plataformas e infraestructuras ferroviarias y una España de segunda, que
no tiene derecho a esas inversiones. Y para ello se utilizan unos pseudo
informes de otros países como Portugal y como Francia.
Yo tengo que decir que el compromiso del
Partido Popular no responde más que a criterios de justicia y de rentabilidad
económica y social y que las inversiones para llevar la alta velocidad
a la meseta, y de la meseta a Castilla y León y a Galicia, a Asturias, al País
Vasco, a Extremadura, son inversiones necesarias para colocarnos en
una situación de competitividad.
Nos alegramos por las inversiones en todos
los territorios de España, pero les pediríamos a ustedes que también se
alegren y que defendamos la solidaridad que tanto hemos practicado con
algunos territorios.”
Achego links que permite visualizar o
Diario de Sesións
E os que enlazan ás duas aludidas
intervencións
O citado debate xerou en Galicia, unha
abundante información periodística e mediática que recollo de seguido.
O diario “La Región” do 28.1.2015, titulaba
“Celso Delgado defiende el AVE a Galicia como una inversión de justicia”
O periódico “La Voz de Galicia” do
28.1.2015, titulaba “ CiU pide de nuevo paralizar el AVE a Galicia
esgrimiendo informes de Francia y Portugal” e subtitulaba “El PP le reprocha
que critique las obras cuando Cataluña tiene ya una línea de alta velocidad
gracias a las inversiones del Estado”
O periódico “Faro
de Vigo” do 28.1.2015, titulaba: “El PP defiende la rentabilidad del AVE
gallego frente a un nuevo ataque de CiU a su viabilidad” e subtitulaba “Celso
Delgado sostiene que las inversiones responden a criterios de justicia y pide
que desde Cataluña muestren un poco de solidaridad”
O diario “El Correo
Gallego” do 28.1.2015 titulaba “Delgado lamenta las críticas de CiU por
la inversión en el AVE”
No periódico “La Voz de Galicia” do 29.1.2015, o
periodista especializado nestas materias, Pablo González publicaba un
interesante artigo titulado” Los consejos de CiU y la seguridad ferroviaria”,
no que entre outras cousas dicía: “Se echaba de menos una voz catalana
y nacionalista que iluminara a los gallegos en las lides de este mundo complejo
con su seny, su sabiduría y su modernidad. Porque quizás piensen que, en
esta esquina apartada y periférica, donde se cree que las infraestructuras son
la panacea para todos los males, sus habitantes no son lo suficientemente
adultos para saber qué es lo mejor para su futuro. El ingeniero y diputado de
CiU, Pere Macias, ha vuelto de nuevo al encerado. A enseñar a los gallegos que
no se merecen este AVE. Porque son pocos, alejados de los centros de decisión
y, seguro que lo piensa y no lo dice, un poco insignificantes. En el AVE que
cruza toda Cataluña, conecta todas sus grandes ciudades y se adentra en Francia
-él preferirá hablar de Cataluña norte- Galicia tuvo una modesta colaboración.
Pero nunca quiso sabotearlo. Los gallegos seguirán en los próximos años
destinando una parte de sus impuestos a pagar la enorme deuda del AVE catalán,
que costó más de 12.600 millones. Sin rechistar. Son así de sufridos. Y hasta
entienden que la alta velocidad les llegue al menos 15 años más tarde que a
Lérida. Nunca nadie dijo ni pío contra las inversiones que favorecían a los
hermanos catalanes.
Pero el señor Pere Macias es diferente. Le
gusta dar clases y pedir que ese dinero para Galicia se desvíe a las Cercanías
catalanas. Y se refiere ahora a informes de Francia y Portugal que desaconsejan
construir líneas de alta velocidad. En el caso portugués es fácil. En un país
intervenido no hay nadie en su sano juicio que destine a infraestructuras los
limitados recursos para la sanidad y la educación. En el informe francés, el
Tribunal de Cuentas galo alertaba del riesgo de que las líneas convencionales
quedaran en el olvido por una apuesta excesiva por la alta velocidad. Nadie en
Francia se lanzó a cuestionar que los bretones no pudieran disfrutar de una
conexión ferroviaria eficiente que les dure unos cuantos años. Aquí en España
sí hay gente así. Y mientras hacen las maletas para independizarse, pretenden
diseñar la política territorial del país que quieren abandonar.
Hablar de estos asuntos antes del
accidente de Angrois era casi un juego de niños. Un divertimento para
ingenieros metidos a políticos sin una visión solidaria del Estado. Pero el
accidente de Santiago, que costó la vida a 79 personas -una más aún pendiente
de ser reconocida-, demuestra aún más si cabe que hay que acabar lo que se ha
empezado. Que los tramos aislados de alta velocidad generan confusión y
transiciones bruscas. Y que lo ideal es que todo el acceso ferroviario cuente
con la máxima seguridad que sí disfrutan los ciudadanos catalanes, donde una
autopista -valga la comparación- rara vez desemboca en una corredoira.
Dejar de invertir en lo que ya está muy
avanzado sería además el colmo de la ineficiencia. ¿Tapiamos los túneles, señor
Macias?, ¿dejamos que el agua destruya lo que tanto costó?, ¿indemnizamos a las
constructoras?”
Tamén varios colaboradores habituais da prensa galega
escribiron artigos de opinión.
Así o día 30.1.2015 a “Voz de Galicia publicaba” un
artigo titulado: ”AVE a Galicia y Estado catalán: ¡Tiene narices!” escrito polo
catedrático Roberto Blanco Valdés. Nel decía entre outras cousas: “Para
entendernos, CiU, que gobierna una autonomía que tiene comunicación por AVE con
media España y, a través de Madrid, con casi toda, asegura que existen informes
de Francia y Portugal «severamente críticos con la rentabilidad de las líneas
de alta velocidad». ¡A buenas horas, mangas verdes! O sea, que la escasa
rentabilidad de las líneas de alta velocidad, que no ha impedido instalarlas
con dirección a Cataluña y a otras muchas partes del país, debe ser tenida en
cuenta ahora, cuando toca acabar las de Galicia. A eso se le llama ser
ponderado, imparcial y solidario. Sí, señor.”
No diario “La Voz de Galicia” do 31.1.2015 o profesor
Xosé Luis Barreiro Rivas escribía o artigo titulado “ El tren que
van a perder BNG y AGE”
Tamén na “Voz de Galicia” do 2.2.2015, Marina Mayoral
escribía un artigo titulado “O AVE a Galicia” Nel entre
outras cousas dicía: “Un deputado do Grupo catalán asegurou que tales obras no eran rendibles, e
que provocaban o abandono doutras que si o son, como as liñas de cercanías de
Cataluña, opinión imparcial sen dúbida, e que obedece a esa actitude de algúns
políticos cataláns de decidir soíños o que convén aos cataláns -por exemplo, a
independencia- e , ao mesmo tempo, pretender mangonear ao seu gusto o que
corresponde a outras autonomías.”
No diario “La Voz de Galicia” de 2.2.2015 o
periodista Gonzalo Bareño escribía un artigo titulado “CiU delira a costa del
AVE” no que afirmaba: “La campaña de CiU para paralizar el AVE a
Galicia y desviar esos fondos hacia Cataluña es ya cuento largo. Pero el
delirio de esgrimir en el Congreso supuestos informes de los tribunales de
cuentas de Francia y Portugal que cuestionan la rentabilidad de la alta
velocidad, así en general, dejó perplejos al resto de grupos políticos. Si el
diputado Pere Macías hubiera mostrado la misma creatividad argumental hace doce
años, el Estado se habría ahorrado los 10.000 millones de euros que les ha
costado todos los españoles el AVE a Cataluña.”
No periódico ourensan “La
Región” do 4.2.2015, Víctor González, publicaba un artigo titulado “AVE
Cesar” Nel dicía: “Ponerse en contra del AVE gallego a estas alturas (a punto
de acabarse las obras), incluso aunque tuvieran razón con el argumento que
esgrimen de que es deficitario, resulta una impertinencia fuera de lugar. Es
como si el rico le dijera al pobre: "Deja el caviar muchacho, no es una
buena idea, yo lo tengo en la mesa todos los días y no merece la pena. Es
demasiado caro y no alimenta."
E os ecos deste debate chegaron
tamén doutras latitudes que aínda agardan a chegada da alta velocidade.
Así o día 7.2.2015 o Diario
“ El Correo de Extremadura” publicaba unha información titulada “CiU pone en cuestión las
nuevas líneas del AVE y el PP defiende que la alta velocidad extremeña es de
justicia”
E o periódico
asturiano “La Nueva España” do 20.1.2015 publicaba un artigo titulado “ CiU
critica al Gobierno por dar prioridad a las líneas de AVE de Asturias y
Galicia”
Como se pode comprobar o
debate parlamentario entre o deputado Macias e que suscribe, xerou
unha gran repercusión en Galicia, e mesmo levou a que o presidente
da Xunta se pronunciase ao respecto reprochase a CiU estes ataques
" mentres a súa comunidade non só goza desa infraestrutura dende hai anos,
senón que as súas finanzas reciben un salvavidas estatal. Esa comunidade recibe
miles de millóns pola súa incapacidade para pagar e é máis do dobre do que
custa a AVE que nos negan e que gozan dende hai anos"
Feijoo afirmou que "O concepto
de solidariedade, igualdade e xustiza do PPdeG é moi distinto do dos
nacionalistas. Somos diametralmente distintos"
Conclúo esta entrada, manifestando o meu
respecto á liberdade de expresión e de criterio de calquera deputado, como é o
caso do Sr. Macías – co que une unha boa relación persoal - pero
tamén o meu frontal rexeitamento ás súas posicións partidarias neste tema que
considero insolidarias.
En calquera caso, unha vez máis reitero a
miña admiración e respecto polo pobo de Cataluña, parte esencial deste gran
país que é España, e ao que desexo a maior prosperidade.
Si desexa facer algún comentario poder enviar un correo a celso.delgado@congreso.es
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