El pasado jueves 28 de mayo tuvo lugar la comparecencia del presidente de la Sociedad Estatal Correos y Telégrafos, S.A., S.M.E., Pedro Saura en la Comisión de Hacienda y Función Pública para informar a iniciativa del Grupo Parlamentario Popular sobre el contenido íntegro de la disposición final nueva por la que se modifica la Ley 43/2010, de 30 de diciembre, del servicio postal universal, de los derechos de los usuarios y del mercado postal.
Reproduzco aquí parte de este debate, en los términos recogidos por las taquígrafas del Congreso:
"El señor DELGADO ARCE: Gracias, señor presidente.
Señorías, señor Saura, como ustedes ya conocen, al Grupo Parlamentario Popular le interesa especialmente esta gran empresa pública postal que es Correos, que tiene más de 50.000 trabajadores y, por ello, está muy seriamente preocupado por la situación crítica en la que se encuentra, que es la que motiva justamente las modificaciones legales que se han introducido mediante una enmienda a la proposición de ley de modificación del régimen fiscal de Canarias. En estos breves diez minutos, intentaré fijar posición y hacer algunas preguntas.
Señor Saura, la situación de desastre económico en la que se encuentra Correos se deriva fundamentalmente de la pésima gestión de los años 2018 a 2023, en la que en la presidencia de Correos estuvo su antecesor, Juan Manuel Serrano, que fue puesto al frente de esta gran empresa pública solo por criterios de amistad política con don Pedro Sánchez porque había sido su jefe de gabinete en la Ejecutiva Federal del PSOE, y también porque la ministra y vicepresidenta, la señora Montero, lo mantuvo en el cargo, y la presidenta de la SEPI miraba para otro lado, es decir, una clara culpa in vigilando.
Y no será porque desde el Grupo Parlamentario Popular y los sindicatos más representativos no se fuera advirtiendo de que con esa gestión esta empresa pública se podía situar en riesgo de disolución. Desgraciadamente eso se cumplió, porque el señor Serrano dejó a Correos en cinco años en pérdidas superiores a 1.200 millones de euros antes de impuestos, con el consiguiente quebranto para la Hacienda pública. El patrimonio neto —valga este dato— de la Sociedad Estatal Correos bajó un 49 %, de 1.457 millones en 2019 a 724 en 2023, que es el último dato conocido.
Además del desastre económico, citaré tres ejemplos de grandes escándalos: el primero, el fiasco de Correos Cargo, aquello de los aviones. Segundo, los bonus millonarios —se acaban de citar— que se pagaban al equipo directivo, pese a acumular monumentales pérdidas. Y lo último que hemos conocido justamente en estos días es que entre noviembre de 2021 y febrero de 2024 —en que usted la cesó—, estuvo trabajando como directora de Relaciones Institucionales y de Filatelia una persona que se llama Leire Díaz, que estos días se ha escuchado cómo intenta conspirar para desacreditar al máximo representante, el teniente coronel de la UCO, que se ocupa de la delincuencia económica; además con unas prácticas claramente mafiosas. ¿En qué manos ha estado Correos en esos años? ¿En qué manos ha estado Correos? (Aplausos.—Varios señores diputados: ¡Muy bien!).
Señor Saura, usted ha tomado el relevo en el 2024 y, efectivamente, ha dado cuenta, a través de una nota en marzo de 2025, de que han reducido las pérdidas de la compañía. Han perdido 94 millones de euros después de impuestos, pero no sabemos cuál es la cifra antes de impuestos. Este resultado es obviamente mejor que el del ejercicio anterior, pero se ha dicho también aquí que se ha conseguido fundamentalmente sobre la base de la reducción de los gastos y, principalmente, sobre la no contratación de personal especialmente en los meses de julio y agosto. Los periódicos de toda España estuvieron dando cuenta de las quejas en todos los centros de falta de personal para realizar las sustituciones. Lo que no han conseguido todavía es incrementar la facturación y la actividad, y es lo que nosotros deseamos.
Ustedes, justamente por esta situación, han hecho una reducción de capital. El 18 de noviembre de 2024 —esto no se ha dicho aquí todavía— el capital social de Correos se redujo en 211 millones de euros, pasó de 611 millones a 400 millones. ¿Y cuáles son las razones? El Boletín Oficial del Registro Mercantil lo dice: se realiza con la finalidad de sanear el patrimonio neto de la sociedad y compensar las pérdidas acumuladas de ejercicios anteriores y las previstas para el propio ejercicio 2024. Por eso, se incluyó en el decreto ley que no se convalidó una disposición adicional, que en su exposición de motivos decía que todo lo que se regulaba allí era un todo necesario para eludir en el corto plazo el riesgo de disolución de la empresa. ¡Es que esta es la situación! Y de ahí esta normativa que usted ha traído, aunque no de la forma adecuada, señor Saura, ya se lo hemos manifestado. No es una empresa pública de 50.000 trabajadores la que se merezca que unas modificaciones legales tan importantes vengan a través de una enmienda intrusa en una proposición de ley del régimen fiscal de Canarias que nada tiene que ver. Pero bueno, aquí está y nosotros constructivamente nos pronunciamos sobre ella.
Respecto del Plan Estratégico 2024-2028, ¡es muy importante, porque va a afectar a ejercicios en los que previsiblemente la fuerza política que le nombró a usted puede que no esté al frente del Gobierno si los electores deciden otra cosa! Por tanto, este plan, en su aprobación y en su ejecución, vincula, y por eso a nosotros esto nos preocupa especialmente. Y desde luego, claro que valoramos el hecho de que se haya suscrito el acuerdo con los sindicatos más representativos, así tiene que ser en una empresa pública con 50.000 trabajadores, tiene que ser velando por los intereses del accionista mayoritario, que somos todos —el Estado—, pero también teniendo en cuenta a la parte social y a la parte laboral, tan importante en una actividad tan cercana como la de Correos.
Nosotros, efectivamente, coincidimos en que es necesario ampliar el plazo de condición de operador designado por el Estado para seguir gestionando cinco años más, eso lo entendemos, y también somos partidarios de que se pongan en marcha los servicios económicos de interés general, servicios que tienen ya otros operadores postales. Y permítame un inciso: los operadores postales europeos públicos ¡llevan años teniendo, con carácter general, resultados económicos positivos, y el nuestro, desgraciadamente, negativos! Este mismo ejercicio 2024 —ya han publicado los datos—, esos operadores públicos han ganado dinero, como La Poste o Correios de Portugal. Correios de Portugal ha ganado 72 millones de euros y nosotros hemos perdido, según ustedes, después de impuestos, 94 millones de euros. Pero los resultados de Alemania, Bélgica u Holanda son todos positivos. Por tanto, en un mismo contexto de dificultades del postal puro, se están teniendo beneficios, con complicaciones y en un mundo muy competitivo, lo reconocemos, y por eso nosotros queremos ir por esa senda.
Y claro que hay que crecer en paquetería. El comercio electrónico ha impulsado la paquetería en España de una manera extraordinaria, pero es que en el segmento de paquetería la cuota de Correos en 2020 era del 29,3 % y en el último año conocido ha sido tan solo del 19,4 %.
Respecto de la entidad financiera, usted hizo unas manifestaciones hace unos meses en las que decía que en 2025 existiría una ficha bancaria. Luego hemos leído a través de otros representantes de Correos que van a hacerlo a través de una entidad de dinero electrónico, me gustaría que nos lo explicara.
Y ahora le voy a hacer rápidamente un conjunto de preguntas, porque en el plan estratégico hemos oído —ya lo decía el portavoz de VOX— hablar cifras de 3.000 y de 4.000 millones. Por favor, ¿nos puede concretar el montante efectivo que tiene este plan estratégico? Y, más concretamente, ¿Cómo se periodifica en anualidades? Y otra buena pregunta. Si no tenemos presupuestos generales del Estado, ni expectativa de tenerlos, ¿Cómo vamos a instrumentar estas aportaciones? ¿Cuánto va a recibir Correos para financiar el servicio postal universal? ¿Van a ser 250 millones de euros? ¿Cuántos se han aplicado ya en 2024? Es un dato que hemos pedido por escrito y no lo tenemos. Nos gustaría tener la respuesta.
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, que tiene funciones de determinación de la cuantía de la carga financiera injusta que corresponde al operador, ¿está informada?, ¿conoce estas pretensiones? Nos gustaría saberlo. Lo mismo que conocer cuánto va a recibir Correos del Estado para financiar los servicios de interés económico general. Hemos oído hablar de 150 millones, pero es que todo lo leemos en notas de prensa y no lo vemos puesto sobre el papel, y los parlamentarios queremos certidumbres y certezas.
Señor Saura, el crecimiento orgánico desde la matriz con nuevos SIEG lo vemos importante. En cuanto al crecimiento inorgánico, es decir, las compras de otras empresas para reposicionarse internacionalmente, como han hecho nuestros competidores europeos, ¿es algo en lo que el plan estratégico está pensando? Porque si no se incrementa la actividad y se incrementa la facturación, difícilmente se va a conseguir lo que se pretende, que es que se pueda compatibilizar el carácter público y la prestación bien del SIEG y del servicio postal universal con la necesaria rentabilidad y sostenibilidad de la empresa.
Respecto a los aspectos laborales, me remito a muchas de las cuestiones que han sido dichas. Nos interesa mucho que nos explique qué cuantía van a destinar al cuarto convenio colectivo y al plan de rejuvenecimiento. Hemos oído hablar de 1.000 millones de euros e incluso de una cifra superior. Nos gustaría saber a cuántas personas afectaría el plan de salidas voluntarias, y también lo que he oído hablar en otra ocasión: un plan de entradas organizado para dar servicio a un conjunto de actividades de Correos que hoy por hoy no se pueden ejercitar por falta de personal. En el segundo turno diré alguna cosa más."
En primer lugar, quiero agradecer todas las intervenciones por el tono y también por las preguntas y aportaciones al debate sobre el presente y el futuro de esta compañía, lo cual es importante para todos los que estamos aquí, en esta sala. Creo que es un buen principio para sentar las bases de la implementación de ese plan estratégico, producto de un amplio consenso político de todas las fuerzas políticas aquí representadas.
Se han dicho cosas y se han hecho preguntas interesantes, y muchas se han repetido y están entremezcladas, por lo que voy a tratar de ver cómo, de manera coherente, contesto a todas ellas. El señor Rego ―y creo que también el señor Matute― hablaba de ajuste, o sea, que lo que yo había planteado en mi intervención era básicamente una idea del ajuste para tratar de cuadrar las cuentas, y en torno a eso ha sido toda mi intervención. Les quiero decir que probablemente me he explicado mal ―con toda seguridad―, porque justamente lo que quería transmitir es la necesidad de un reposicionamiento y de una transformación de esta compañía pública postal, como han hecho todas las grandes compañías públicas postales que funcionan en el mundo, pero que no lo han hecho hace cuatro o cinco años, lo hicieron hace veinte o veinticinco años. De eso he hablado.
Evidentemente, creo que todos estamos de acuerdo en que las compañías públicas también tienen que estar equilibradas desde el punto de vista financiero. Creo que podemos estar de acuerdo en esto. Y justamente el año pasado la reducción de pérdidas no se ha basado en el ajuste de personas. No ha sido así, lo he tratado de explicar. He dicho que la mayoría, por encima de 80 millones de euros, ha sido producto de una reducción de costes, pero no de costes laborales, porque los costes laborales no se han reducido. ¿Ha caído el peso de los costes laborales en el total de ingresos? Sí, pero porque se ha incrementado el denominador, los ingresos, que eso es lo que pretende el plan estratégico, que los ingresos hagan crecer el denominador para que crezca el peso, porque ustedes entenderán que un peso del 85 % es un peso… En fin, no se conocen muchas compañías públicas ―ya no digo las privadas― con un peso tan grande de esos costes.
Creo que en eso también podemos estar de acuerdo. Por tanto, la reducción del déficit no se ha basado en los costes de personal. Es más, entre 2022 y 2023 se ha estabilizado nada más y nada menos que a 11.000 personas en la compañía; por el contrario ―lo decía al principio de mi intervención―, se han reducido los envíos en un 60 %. ¿Y esto ha pasado en España? No solo en España. Todas las compañías postales en el mundo ―públicas, privadas, públicas que luego se han privatizado―, todas, tienen problemas económicos. Excepto tres de las grandes, todas y en todos los países. No solo Correos; todas, menos tres. Y en esas tres sus decisiones se tomaron hace mucho tiempo, hace veinte o veinticinco años.
Es más, si uno entra en la estructura de costes, de ingresos, el EBITDA, los resultados, por ejemplo, de La Poste francesa, ¿gana dinero? Sí, señor Delgado, sí, pero pierde dinero con el postal y la paquetería. Gana con las actividades financieras y de seguros, que más que compensan la pérdida del postal y la paquetería. ¿Cuándo se tomó la decisión estratégica? En el caso francés, en 2006, creando un banco. En el caso de DHL, la decisión logística se tomó por la misma fecha. Y en el caso de La Poste Italiana, pierde dinero con el postal, por supuesto, y con la paquetería también, y más que compensa con los servicios de seguros y los servicios financieros. Lógicamente, tanto en el caso francés como en el caso italiano, ante los fallos de mercado en este sector ―tanto el postal como la paquetería― y ante el fallo de mercado del sistema financiero, con aportación pública, porque hay evidentes fallos de mercado. Esto es teoría económica pura y ortodoxa. Cuando hay un fallo de mercado, se resuelve con aportación pública. Esto es teoría económica pura y dura de los manuales de microeconomía.
Señor Delgado, la cuestión es que esa indefinición estratégica te lleva, como al resto de compañías en el mundo de este tamaño y de este sector, a tener pérdidas. Lean ustedes, lean. Solo estas tres, pero no por el postal y la paquetería, porque en el caso del postal está decreciendo y en el caso de la paquetería ―lo decía en mi intervención― es tal la competencia y la sobreproducción que es muy complicado tener márgenes. Es más, en el caso de Correos, el año pasado la paquetería creció un 14 %; de Correos, no de Correos Express, que es una filial de Correos. La paquetería de Correos matriz creció un 14 % y el total de sus ingresos creció más de un 3 %. Cayendo en este sector el postal un 3 %, que representa el 75 % de los ingresos de la compañía, no hay compañía en el mundo en la que el postal represente tanto en los ingresos. En el caso de La Poste francesa, su plan estratégico dice que a finales de esta década los ingresos del postal van a representar en torno al 5 %. Nosotros tenemos el 75 %.
Cuando se habla de los últimos años ―con todo el respeto y el cariño intelectual que le tengo al señor Celso Delgado, personal, político e intelectual, que además sé que conoce Correos y que quiere a la compañía―, es que los últimos cinco han sido son años de pandemia, muy complicados en la toma de decisiones. Este es el contexto, señorías. Y en este contexto ―una compañía que tiene trecientos años de historia y que tiene a tantas familias pendientes de debates como este―, yo creo que este debate ha tenido altura. Las familias de Correos hoy están contentas porque este debate ha tenido altura. En este sentido, tenemos que pensar que, con una compañía que tiene trescientos años de historia, tan importante y que puede jugar un papel muy relevante ante un mundo nuevo, conviene que todos arrimemos el hombro y que tomemos las decisiones con toda la transparencia del mundo, con la rendición de cuentas necesaria y respondiendo a las preguntas que se hagan aquí o que se puedan hacer más adelante. Es muy importante. Desde mi punto de vista, en mi humilde opinión, creo que Correos ahora es más estratégico que antes, y hablaremos un poco más adelante de esa circunstancia.
La falta de personal creo que hay que contextualizarla, como digo. Se ha estabilizado un volumen muy importante de personas y su actividad ha caído también de manera muy importante, incluso en las oficinas. ¿Sucede solo en el caso de Correos? No, en todo el sector retail, en todo. Entonces, yo creo que vale la pena plantear el reto del plan estratégico y aprobar y avanzar en esta enmienda. Porque, señor Delgado, el hecho factual es que estamos aquí hablando de la enmienda ―y no quiero mirar hacia atrás, quiero mirar hacia delante― porque no se aprobó el real decreto ley. Si se hubiese aprobado… Porque esta disposición estuvo en vigor, con el agrado y el cariño de todos los sindicatos de la compañía, de todos los trabajadores de la compañía, y luego decayó. Pero no quiero volver al respecto, no.
Y sobre la heterogeneidad de las leyes, usted, que es un veterano de la casa ―yo también he vivido muchos años aquí―, sabe que este es un problema que viene del año 1978. Hay tanta heterogeneidad… Han gobernado el PP, el PSOE, el PSOE y el PP. La heterogeneidad de las leyes es manifiesta, pero, afortunadamente, ahora hay un proyecto de ley. Y quiero agradecer también a Coalición Canaria que el otro día dijese explícitamente en el Pleno que están de acuerdo con esta enmienda. Yo creo que es un gran momento para ello. Por cierto, sobre la huelga de hoy, señor Matute, hay que respetar siempre el derecho de los trabajadores a manifestarse, pero mis últimos datos hablan de un seguimiento del 5 %.
En cuanto a lo público-privado, insisto en que lo que sucede en los casos de éxito europeos es que hay una combinación público-privada. Lo público está cuando se produce un fallo de mercado, pero lo privado también está, en todos los casos. Es decir, compites en el mercado, claro que sí; eso pasa en todos los casos. Y en el de DHL, no digamos. Señor Delgado, en el caso del Correos portugués, la compañía fue privatizada, y las reglas ahí también son diferentes desde el punto de vista de la cuenta de resultados. Normalmente, hay muchas externalidades que el sector privado no internaliza en su cuenta de pérdidas y ganancias. Y en el sector público, hay muchas externalidades cuyos costes las empresas públicas los meten en la cuenta de pérdidas y ganancias. Por consiguiente, podemos entender que sus beneficios sean menores porque internaliza externalidades negativas. Lo digo por contextualizar todo lo que se ha dicho. Básicamente, estoy tratando de contestar, y perdónenme si no lo hago de manera ordenada. Por supuesto, hemos tenido el caso de AXA, donde, lógicamente, con total transparencia, ha habido competencia, como no puede ser de otra manera. Y hemos recibido la autorización del regulador, de la Dirección General de Seguros, insisto, como no podía ser de otra manera.
El señor Martín me ha hecho preguntas específicas, y también el señor Celso Delgado y el señor Sáez. Creo que todos han hablado de estas cuestiones. En relación con el SPU, el servicio postal universal, lo que nos va diciendo, señor Martín, la CNMC es que, según los años auditados, hasta 2020, ahora mismo se nos tendría que compensar acumuladamente ―de momento hasta el año 2020, queda todavía 2021― con 80 millones de euros. Es decir, desde el punto de vista de cómo debería quedar ―lo digo por las preguntas que me hacía el señor Delgado― el SPU resultante, que tiene que ver con la enmienda, será precisamente de acuerdo con lo que va diciendo la CNMC. Esto es, ya sabemos que hay un déficit y que nos debería llevar a un SPU de en torno a 250 millones de euros anuales, de acuerdo ―insisto― con lo que hasta ahora nos está diciendo anualmente la CNMC.
Sobre los SIEG ―me han hablado de ello el señor Delgado, el señor Martín y el señor Sáez―, efectivamente, ha de haber una metodología y tienen que ser auditados por la Comisión Europea. Hay una cobertura europea, porque también en este caso estamos hablando de otro fallo de mercado. Es decir, en términos de racionalidad económica estricta y pura, si Correos quisiera maximizar beneficios privados, debería cerrar un montón de oficinas en toda la España rural, pero, como eso no lo quiere hacer nadie ―estoy convencido que ninguno de los grupos presentes en esta Cámara―, justamente la compensación de los SIEG tendrá que equivaler a lo que cuesta ese fallo de mercado, que es el déficit que tiene Correos en la España más rural. Y sobre eso hay metodología, lo hemos estimado. Yo decía en mi intervención que la suma de a lo que aspiramos en lo público y lo privado debería añadir 400 millones de euros al final del periodo. Permítanme que no ajuste las cantidades porque, lógicamente, hay que ir aplicando, como no puede ser de otra manera, para que no sea ayuda de Estado, la metodología correctamente.
Sobre los 3.000 millones de los que ustedes, el señor Sáez y el señor Delgado, han hablado, permítanme, en aras de la concordia, en aras del acuerdo, que, como no conozco el marco en el que se ha dicho ni qué cosas se querían decir, no entre. No voy a entrar porque no conozco el marco: no conozco lo que se sumaba, si era solo anual o en todo el periodo, ni si eran solo inversiones o inversiones más aportación del Estado. Los 600 millones de los que yo hablo no son aportación del Estado, porque no podrían serlo. Tienen que salir del EBITDA o del endeudamiento de la compañía; si no, sería ayuda de Estado. Esos 600 millones son inversiones que la compañía tiene que hacer inevitablemente, y forma parte de su gestión. Por consiguiente, no voy a entrar en eso porque no conozco el contexto.
Sobre el sistema financiero de los SIEG, dos cosas, señor Martín. Efectivamente, hay un fallo de mercado en lo específico en muchos servicios, y particularmente en el financiero. Es evidente. Pero yo creo que lo que quiere hacer Correos en su contrato programa no excluye lo que tengan que hacer los bancos y los compromisos del sistema financiero con las autoridades financieras españolas. No lo excluye, es complementario; sus obligaciones, sus acuerdos con las autoridades españolas tienen que seguir en funcionamiento. Por consiguiente, considero que esa es la vía para resolver la pregunta que usted me hacía en su intervención.
En cuanto a los temas financieros, sobre los que creo que prácticamente todos ustedes han hecho preguntas, está bien que pensemos en esta cuestión y que hablemos de ella. Yo no he hablado públicamente de ficha bancaria como tal ―trato de ser prudente en mis manifestaciones, aunque no siempre lo consigo―, sino de una entidad de dinero electrónico. De una ficha bancaria no he hablado; no obstante, considero que debemos salir ―si me lo permiten― de nominalismos. En este momento, Correos tiene 450.000 tarjetas prepago ―o sea, monederos bancarios o financieros―, 70.000 IBAN y 330.000 tarjetas del bono cultural joven. Con Correos Cash se realizan 120.000 operaciones, y en el giro postal la remesa nacional tiene un valor de en torno a 1.000 millones de euros y hay 450 millones de remesas internacionales. Lo que quiero decir es que la idea del plan estratégico es integrar todos estos servicios financieros, dar un salto adelante, huir de los debates nominalistas y buscar soluciones; no una, sino varias soluciones prácticas, realistas y que se puedan aplicar en el corto plazo. Cuando uno mira lo que hacen dos entidades de éxito de nuestro entorno, ve que lo que hacen es utilizar un conjunto, una panoplia de instrumentos, de soluciones para estar en estos sectores que son de utilidad para los ciudadanos y que, por otra parte, también implican unos retornos y un valor añadido importante para la compañía. Esta es mi contestación a las preguntas que me han hecho: algo práctico, real y razonablemente inmediato, y creo que se puede hacer. El contrato de AXA es una de las vías para la solución. En el caso italiano y en el caso francés, por ejemplo, hay acuerdos con multitud de bancos, con multitud de entidades. Es decir, creo que hay vías para tratar de añadir valor y poner también en valor la red de Correos, y uno de los objetivos del plan estratégico es poner en valor la red de Correos en beneficio de los ciudadanos. Esto es algo muy potente, hacia adelante, de la red.
Por cierto, Correos es una compañía que tiene crédito. Les decía anteriormente que eran importantes los consensos en torno a la compañía porque los ciudadanos españoles confían en la compañía. En el voto por correo, en elecciones comparables ―europeas, autonómicas o estatales―, en todas ellas se ha doblado el voto por correo en las oficinas de Correos, lo que habla muy bien de la credibilidad de la compañía y de la credibilidad ante los españoles de la compañía desde el punto de vista de esa utilidad.
Termino ya prácticamente. Había un dato de calidad. La calidad la medimos. De acuerdo con el servicio postal universal, tenemos que medirla y se nos audita porque tenemos un contrato de prestación de ese servicio. Lo tengo aquí. En la carta ordinaria, en D+3, el objetivo es del 93 %; sin embargo, hasta abril el acumulado es un 96,4 %. En D+5, el objetivo es el 99 % en la carta ordinaria y el acumulado hasta abril es un 99 %. En el certificado, en D+3, el objetivo es del 93 % y el acumulado es un 94,8 %. Y en D+5, el objetivo es del 99 % y el acumulado hasta abril es un 98,8 %. Por supuesto, es mejorable. En una compañía que trata de dar servicio a los ciudadanos tenemos que estar atentos a todas las quejas y a todas las posibilidades de mejora que tiene la compañía, por supuesto que sí, y recogemos todas sus sugerencias y preguntas.
En definitiva ―termino ya y quedo a la espera de sus nuevas preguntas y de sus nuevas consideraciones―, creo que tenemos un reto ambicioso, que la oportunidad es histórica, que el momento es muy relevante y que va a necesitar de todos los grupos políticos.
El señor PRESIDENTE: Gracias, señor Saura.
Tenemos un segundo turno de intervención para los grupos que quieran hacer uso del mismo.
El señor DELGADO ARCE: Gracias, señor presidente.
Decía el señor Saura que qué bien que hayamos tenido este debate, un debate de altura. Esto es necesario; lo que no es de recibo es que la gran empresa pública Correos no tenga ningún tipo de presencia aquí para rendir cuentas ni para recibir sugerencias y planteamientos durante más de una década. Esto es lo que no puede ser. De ahí que nosotros vamos a solicitar que en el trámite de transacciones en ponencia se establezca el compromiso de comparecer anualmente ante la comisión competente del Congreso para explicar la evolución de este plan estratégico, de estos nuevos servicios de interés general. Si creemos en esta gran empresa pública es conveniente rendir cuentas y escuchar a todos.
Respecto de las cifras que le pedíamos, señor Saura, nos vamos un poco preocupados. Las cifras de 3.000 y 4.000 millones de euros que le digo, pero especialmente la de 3.000, son las que repiten los sindicatos que han firmado con usted en todas sus notas de prensa y en todos sus comunicados, son las que trascienden en todos los medios de comunicación. Lamentablemente, no son las que vemos plasmadas en ningún documento ni tampoco nos ha podido explicar hoy de dónde van a salir, cómo se van a financiar, con qué anualidades y qué instrumento legal van a utilizar si no hay presupuestos generales del Estado. Son preguntas para las que también nosotros necesitamos una respuesta.
No es para polemizar, pero efectivamente usted hizo una entrevista que publicó en septiembre el diario Expansión (muestra un recorte de prensa), cuyo titular es: Correos lanzará su banca en 2005 con los valores de la Caja Postal. Y dice: El operador estatal pedirá al Banco de España licencia para emitir dinero y operar como banco comercial, un servicio que ayudará a tener beneficio en 2026. Puede que no se acuerde, pero lo ha dicho. Luego ha explicado lo del dinero electrónico, y sobre eso podemos hablar, pero efectivamente no nos hemos inventado lo que sí nos constaba que había dicho porque hacemos un seguimiento, como es nuestra obligación, de los temas de Correos.
Es imprescindible conciliar la misión pública de Correos como prestador del servicio postal universal y de los nuevos servicios de interés general con una capacidad para ser competitivos y rentables en los ámbitos donde concurre el sector privado. Nosotros estamos en la línea de contribuir a que esto sea así.
Estamos en la línea de contribuir a que con el diálogo con los sindicatos y los trabajadores se pueda sacar adelante a esta compañía. Nosotros, obviamente, buscaríamos otro tipo de gestión; lógicamente, no son ustedes los gestores que nosotros pondríamos, pero son los que están, y a usted personalmente se le respeta por la gestión que ha venido haciendo. Le pedimos que tenga en cuenta que este plan estratégico es a varios años y que tiene que escuchar al principal partido de la oposición, como también las opiniones del resto de los grupos, y por eso en el trámite de ponencia le pido que contribuya a que no se desaproveche la oportunidad de incorporar planteamientos muy necesarios para ver si finalmente esta iniciativa puede contar con nuestra aprobación, sobre la cual hoy no anticipo nada. Muchas gracias. (Aplausos).
El señor PRESIDENTE DE LA SOCIEDAD ESTATAL CORREOS Y TELÉGRAFOS, S.A., S.M.E. (Saura García): Gracias, señor presidente.
Intervengo también de manera muy breve. Vuelvo a agradecer el tono de las intervenciones. Perdone, señor Delgado, pero antes no le he contestado a una pregunta que me ha hecho usted de manera directa, y es: cómo piensa reequilibrar patrimonialmente la compañía. Le dije en la primera intervención que la Sociedad de Participaciones Industriales Española (SEPI) ha hecho una aportación de 200 millones de euros a la compañía justamente en esa dirección. En segundo lugar, efectivamente, el hecho de que la compañía empiece a tener EBITDA positivo es otro elemento que ayuda a reequilibrarla patrimonialmente. Esos dos elementos van en esa dirección.
Sobre las cantidades, insisto, no sé si son 3.000 o 4.000 y no quiero entrar en ello porque probablemente se está hablando de cosas heterogéneas que yo no conozco. Esos 600 millones de euros, señor Sáez, van en la dirección correcta, en la dirección de mejorar la competitividad de la compañía y prestar mejores servicios; así que, por tanto, bienvenidos sean también esos 600 millones de euros. No sé en qué términos, en qué contexto y qué se suma para llegar a esas cantidades y no voy a entrar en pro del consenso que estamos buscando. Sobre la ficha bancaria, una cosa es decir que vamos a trabajar en el sistema financiero y otra cosa es decir que yo voy a pedir una ficha bancaria, esto es lo que yo quería señalar. No le quiero decir que usted esté diciendo algo que no es verdad, pero también entenderá que yo no llegué hasta este punto con esas palabras, porque sé profesionalmente lo que es eso.
Finalmente, y en aras de esa transparencia, de buscar los consensos y de hacer un seguimiento a ese plan estratégico, mi compromiso, si ustedes lo creen oportuno, si el Congreso y si esta comisión lo creen oportuno, es venir cuantas veces se me requiera, y al menos una vez al año, a dar cuenta. Por mi parte no hay ningún problema, aunque, lógicamente, dependerá del Congreso y de los distintos grupos parlamentarios en aras, como digo, de ese consenso.
En definitiva, y termino ya porque no quiero alargarme, insisto en el tono y la calidad de las intervenciones. Había mucha gente, muchas familias, muchos ciudadanos interesados por este debate, y yo creo que hoy Correos sale fortalecida de esta comisión porque todas las intervenciones han ido en la dirección de construir el futuro de esta compañía, querida por todos los grupos políticos aquí representados. Por tanto, en nombre de todos ellos, muchísimas gracias. (Aplausos).
El señor PRESIDENTE: Señorías, doy las gracias a todos los grupos parlamentarios por su trabajo esta tarde en la comisión, y de manera singular al presidente de Correos y Telégrafos, a don Pedro Saura, por estar aquí presente en la que es su casa, por la información que nos ha aportado, por las explicaciones y respuestas a las preguntas, y de manera singular por su disposición a continuar presente y participando en esta comisión.
Gracias.
Se levanta la sesión.