De igual
manera, el Grupo Popular sacó adelante uno de los puntos de su Moción sobre las
cesiones del Gobierno en inmigración y fronteras. Pese al voto en contra de
PSOE y Sumar, el Pleno aprobó instar al Gobierno a “pedir el despliegue
inmediato de efectivos de Frontex en la ruta canaria para apoyar a las Fuerzas
y Cuerpos de Seguridad del Estado en la gestión de la crisis migratoria,
incluyendo la recopilación de información sobre redes de tráfico de inmigrantes
y la aplicación del Plan de Acción sobre las rutas del Mediterráneo Occidental
y del Atlántico”.
Además, los
dos partidos del Gobierno de Pedro Sánchez han vuelto a demostrar su desprecio
al Parlamento al rechazar la propuesta del PP que, entre otras cosas, pedía
someter a la autorización del Congreso cualquier decisión del Ejecutivo sobre la
guerra de Ucrania y la OTAN.
Las
diferencias patentes entre PSOE y Sumar se han plasmado en la votación de la
iniciativa sobre Defensa que pide la salida de España de la OTAN y rechaza
cumplir con el compromiso europeo del gasto en Defensa. Con un Gobierno que se
fractura una semana sí y otra también es inviable pretender que nos tomen por
serios en Europa.
No pasa una
semana sin que el Gobierno se rompa en las votaciones o encaje una nueva
derrota parlamentaria, como ha ocurrido en la votación del Dictamen de Comisión
del Proyecto de Ley por el que se crea la Agencia Estatal de Salud Pública que
ha sido tumbada con los votos del PP.
Además, la Presidencia del Congreso, ocupada ayer por el vicepresidente primero, volvió a evidenciar una vez más que está al servicio del Gobierno de Sánchez al no atender la petición del portavoz del Grupo Popular, Miguel Tellado, para el aplazamiento del segundo punto del orden del día del Pleno, relativo a las enmiendas del Senado al Proyecto de Ley de prevención de las pérdidas y el desperdicio alimentario, una decisión en contra de la doctrina del TC y del criterio del secretario general de la Cámara y que nunca se había producido en casi 50 años.