martes, 3 de mayo de 2011

Debate de apoyo al comercio minorista



Hoy debatimos una moción del Grupo Popular sobre las medidas que va a adoptar el Gobierno para estimular el consumo interno e impulsar las ventas del comercio minorista.

Estas fueron las palabras que pronuncié desde la tribuna del Pleno del Congreso:

"Señor presidente, señorías.

El pasado 13 de abril interpelaba a la señora vicepresidenta segunda y ministra de Economía y Hacienda sobre las medidas que iban a adoptarse para estimular el consumo interno e impulsar las ventas del comercio minorista. Le exponía entonces unos datos muy graves que hoy, veinte días después, tengo que actualizar.

Llevamos veintisiete meses de caídas ininterrumpidas de las ventas del comercio minorista en esta legislatura.

Esto no tiene precedente en ninguna otra crisis que haya vivido nuestro país. Acabamos de conocer el índice general de ventas del comercio minorista a precios constantes, que registró una variación interanual del menos 7,9 por ciento en marzo, más de tres puntos por debajo de la registrada en febrero; una enorme caída. Y la tasa media de las ventas del sector minorista se situó en el menos 5,8 por ciento de ventas en el primer trimestre de este año respecto del mismo periodo de 2010. Además, esta caída ha afectado a todos los modos de distribución: hipermercados, cadenas, tiendas minoristas. La ocupación, algo tan importante en el sector comercial, ha descendido en tasa interanual en un 0,5 por ciento y se está en una permanente destrucción de empleo desde agosto de 2008.

No es una situación la nuestra similar a la del resto de los países de la Unión Europea; es aquí donde más cae la actividad del comercio minorista, según el último dato conocido de febrero de 2011. Hoy mismo hemos conocido el dato de uno de los sectores minoristas también de ventas, la venta de coches en España, el último dato de marzo de 2011, un descenso del 48 por ciento en la venta de vehículos a particulares sobre los mismos días del mes de marzo, y tampoco en Europa pasa lo mismo: en el mismo mes en Francia, por ejemplo, cayó tan solo un 11,2 por ciento.

Señorías, vivimos una aguda crisis de ventas del comercio minorista, que tiene mucho que ver con la terrible situación económica que vive nuestro país en relación con el desempleo. Son millones de ciudadanos los que han visto disminuidas sus rentas, su capacidad de compra y, en muchos casos, están dependiendo hoy de un subsidio, que además es temporal.

Señorías, el último dato de la encuesta de población activa es descorazonador: en España hay 4.910.000 desempleados, una tasa del 21,9 por ciento y nada más y nada menos que 1.286.000 hogares tienen a todos sus activos en el desempleo. Esta misma encuesta de población activa nos habla de que se redujo la ocupación en el sector servicios en 74.600 personas en tan solo un trimestre, sector en el que está encuadrado el comercio minorista.

La falta de confianza de los consumidores es la clave de esta baja capacidad de compra, un miedo al futuro, una componente psicológica que está basada en hechos reales, pero también en la enorme desconfianza que tienen en un Gobierno socialista que tantas veces en esta legislatura les ha engañado sobre la importancia y la presencia de la misma.

Es momento también para recordar el alza de los precios, derivada fundamentalmente de la subida de los precios de los carburantes, pero también de la decisión política de subir el impuesto sobre el valor añadido. El último dato conocido del IPC adelantado del mes de abril de una subida del 3,8 por ciento en tasa interanual, que es una tasa muy importante, superior en un punto a la tasa de la Unión Europea, evidencia hasta qué punto se le están creando dificultades a las economías familiares tan maltrechas para poder consumir, para poder afrontar el día a día.

Las subidas de impuestos del Gobierno socialista han provocado la subida de la inflación hasta el 3,8 y la caída del consumo en un 8 por ciento.

Pues bien, le decíamos el otro día a la señora vicepresidenta que plantearíamos una iniciativa constructiva, con un modelo económico diferente al modelo económico socialista, que pasa por introducir incentivos fiscales a la actividad empresarial para mejorar la competitividad.

Nosotros proponemos un plan de modernización del comercio, pero que contemple, entre otras medidas, la ampliación del concepto de innovación a efectos fiscales. Como decía hace pocos días la mayor organización de autónomos de este país, un plan de choque que evite la destrucción de comercios y un plan de empleo en un sector que constituye un importante elemento de cohesión social en España.

Pedimos para las empresas de reducida dimensión, cuya cifra de negocio sea inferior a 5 millones de euros, que se reduzca de forma permanente y sin condiciones el tipo del impuesto sobre sociedades del 25 al 20 por ciento para la totalidad de la base imponible.

 Pedimos que se eleve hasta 12 millones de euros la cifra de negocios para que una empresa pueda ser considerada pymes a efectos fiscales y ampliar el primer tramo de la base imponible que tributa al 25 por ciento hasta 500.000 euros.

 Pedimos que se ajuste la tributación por módulos a la caída real de la actividad. Hoy se está tributando por módulos cuando una situación económica es muy diferente a la que dio lugar el establecimiento de esos módulos.

También presentamos un paquete de medidas para facilitar la financiación y atenuar el impacto y los efectos de la morosidad, permitiendo, por ejemplo, que las pymes y los autónomos no tributen por el IVA de las facturas no cobradas, o permitiendo que las pymes y los autónomos puedan compensar las deudas reconocidas por la Administración General del Estado, las comunidades autónomas y las corporaciones locales con sus impuestos correspondientes, o que se cumpla, por ejemplo, la Ley de Morosidad en las operaciones comerciales creando de forma inminente una línea ICO para financiar deudas de ayuntamientos con pymes y autónomos.

Pedimos y planteamos medidas para mantener el empleo y el fomento de la contratación. Es imprescindible terminar y completar una reforma de la negociación colectiva que permita a las empresas, especialmente a las pymes, el descuelgue de los convenios colectivos.

También creemos imprescindible establecer bonificaciones para las cuotas de la Seguridad Social para jóvenes y mujeres y para los mayores de 45 años durante el primer año. Tiene que haber incentivos claros en las cotizaciones a la Seguridad Social para la contratación si queremos que las personas vuelvan a entrar en el mercado de trabajo, para que los comerciantes, los empresarios, los autónomos contraten. Finalmente, planteamos medidas para fomentar la libre competencia y la unidad de mercado.

Hemos leído con interés la enmienda que nos plantea el Grupo Parlamentario Catalán (Convergència i Unió) que nos propone algunas adiciones a nuestra moción. Estamos en condiciones de manifestar que tenemos la mejor disposición de incorporar tres de las cuatro que se plantean para hacer nuestra moción mucho más potente.
 Señorías, les pido a todos que voten afirmativamente esta moción y, votándola, que apoyen así al sector del comercio minorista tan importante en nuestro país.

Muchas gracias. "

Sometida a votación esta moción obtuvo 145 apoyos, votaron en contra 175 y hubo dos abstenciones. En consecuencia fué rechazada. Una lástima.



(Desde el minuto 02:41:15 al 02:48:52)

http://www.europapress.es/nacional/noticia-economia-congreso-rechaza-facilitar-descuelgue-salarial-pymes-margen-dialogo-social-20110503193103.html