Esta mañana Don Felipe y Doña Letizia acompañados por la Princesa de Asturias han presidido la celebración de la Pascua Militar, que constituye un solemne acto castrense con el que se inicia el año militar.
Tras los honores de ordenanza (arma presentada, Himno Nacional completo y salvas de veintiún cañonazos), Su Majestad el Rey ha pasado revista a la formación, acompañado del jefe de Estado Mayor de la Defensa, el jefe del Cuarto Militar y el coronel jefe de la Guardia Real al mando.
Finalizada la revista, Sus Majestades los Reyes y Su Alteza Real la Princesa de Asturias, junto a las autoridades que les recibieron, se dirigieron, por la Escalera de Embajadores, a la Saleta de Gasparini, don Don Felipe ha impuesto condecoraciones a 20 de los comisionados.
Su Majestad el Rey, terminó su intervención con estas palabras: “Nuestras fuerzas armadas siempre responden con una sola voz, firme y clara, a la llamada a defender nuestra seguridad y nuestra libertad; y eso es así porque están integradas por personas nobles, capaces, comprometidas, que hacen del servicio a España y a los españoles una vocación y una razón de vida.
Por eso os pido que os unáis a mí en el homenaje a los compañeros, que, en el curso del último año, hicieron el mayor de los sacrificios posibles; los que perdieron la vida en acto de servicio.
Quiero que mi abrazo llegue, junto con el de la Reina y la Princesa, a los familiares, a los amigos, a todos los que lloran la ausencia irreparable de esos hombres y mujeres. Su servicio será nuestro más alto ejemplo; su memoria alumbrará nuestro camino.
Y ahora os pido que todos juntos gritéis conmigo: ¡VIVA ESPAÑA!”