miércoles, 19 de febrero de 2020

El Gobierno no puede seguir jugando con las empresas electrointensivas gallegas


Hoy en el Pleno del Congreso escucho a la diputada coruñesa Tristana Moraleja formular a la ministra de Industria, Comercio y Turismo , Reyes Maroto esta pregunta: ¿Considera el Gobierno que, aun con un notable retraso, se ha dado una completa solución a los problemas de las empresas electrointensivas?

Comenzó Moraleja agradeciendo el esfuerzo que está realizando el comité de empresa de Alcoa con determinación para defender sus puestos de trabajo ante el ataque de las políticas socialistas al empleo. Y dijo “desde que llegaron al Gobierno  ‑de eso ya hace casi dos años, ministra‑ se han empeñado en poner trabas a sectores estratégicos de nuestro país, y lo que es peor, no aportaron soluciones. Acaban de presentar una propuesta de estatuto de electrointensivas, y después de llevar más de un año esperando por él no convence a nadie ni les satisface, solo a ustedes y a sus socios. Fue en abril del año pasado cuando el señor Sánchez en A Coruña dijo que el estatuto estaba aprobado. No supimos nada de él hasta ahora mismo, y créanme, una vez conocido era mejor no haberlo hecho. Han presentado una propuesta que tampoco satisface a las empresas, puesto que el precio del megavatio/hora quedará en torno a los 49 euros, muy lejos de los 35 o 40 euros demandados por las empresas. Han presentado una propuesta condicionada a los Presupuestos Generales del Estado. ¿Qué pretenden? ¿Chantajearnos? En definitiva, señora ministra, ¿cree usted que la espera ha merecido la pena o, como pensamos todos, es una mala solución que no lo arregla y pone en riesgo el futuro de cinco mil familias?"

La ministra respondió: “estará de acuerdo conmigo en la importancia y la necesidad de tener un marco de estabilidad y certidumbre del precio energético para garantizar la competitividad de la industria electrointensiva, y el estatuto es un instrumento riguroso para abordarlo. Por primera vez se define y certifica la condición de consumidor electrointensivo, se ofrecen medidas para mejorar su competitividad y se establecen compromisos y obligaciones. Esperamos contar con un amplio consenso parlamentario para aprobar esta medida tan necesaria para nuestra industria.”

Replicó la diputada gallega diciendo: “Ustedes, siguen jugando con todos los españoles, todo les vale. En esta propuesta pasamos de casi 200 beneficiarios de toda España a 600, más de 400 empresas beneficiadas. Pero qué casualidad, los más beneficiados son Cataluña y País Vasco, aquellos territorios en los que ustedes necesitan el apoyo. No quieren diferenciar una empresa como Alcoa, en Galicia, de otras empresas que son grandes consumidoras, como usted bien sabe, pero que no tienen nada que ver. En 2017 llegamos a 500 millones de euros para muchas menos empresas. Ahora ustedes pretenden llegar a los 262 para el triple. ¿Aun así considera que el problema está resuelto? Ustedes son incapaces de ver la realidad y lo sabemos bien en Galicia, Asturias y Cantabria. Ya están organizándose para crear un frente del noroeste. El otro día un excompañero suyo dijo algo muy sensato que les debería hacer pensar a usted y a su compañera, la vicepresidenta. Dijo que alguien tiene que pagar la transición ecológica, y nadie ha preguntado quién va a pagarla. En España ustedes ya lo han decidido, que sean muchas empresas y que sea en zonas como la Mariña Lucense y As Pontes, pero espero que usted pueda dormir tranquila como su presidente.”

Cerró el debate la ministra diciendo: “El estatuto ofrece certidumbre y seguridad jurídica, y garantiza la competitividad de más de 600 empresas, el mantenimiento de 300 000 empleos de diversos sectores, que desempeñan un papel clave para la vertebración económica, social y territorial. No es un estatuto para una sola empresa ni para un solo sector ni para un solo territorio; es un estatuto para el conjunto de la industria electrointensiva. Señoría, dígale al señor Feijóo que en Galicia se van a beneficiar 31 empresas por la aprobación de este estatuto, y que queremos contar con su lealtad y colaboración.”

A mu juicio, y compartiendo la opinión de la Xunta de Galicia y de mi compañera diputada considero que necesitamos una política fiscal que grave con menos impuestos la energía que consumen las  hiperelectrointensivas y establezca cuantías como las que había anteriormente en el ámbito del CO2 y en el campo de la  ininterrumpibilidad. El Gobierno no puede seguir jugando con las  electrointensivas gallegas y los 5.000 trabajadores, que salen perjudicados de este Estatuto frente a otros territorios, como Cataluña y el País Vasco, favorecidos por el número de posibles empresas beneficiarias que pasa de 119 a 600.

La crítica situación que atraviesa la industria  electrointensiva gallega tiene su origen en la ausencia absoluta de una política energética por parte del Gobierno central.

Alcoa San Cibrao y  Alu Ibérica son 2 ejemplos de la preocupación que existe tanto en las empresas como nos trabajadores, tal y como le trasladó a la Xunta el comité de empresa de San Cibrao el pasado lunes y ayer mismo el tejido  electrointensivo gallego.

Tras estos encuentros: Galicia fortalece su posición ante una propuesta de Estatuto del Gobierno que es claramente insuficiente. Nuestra Comunidad está en contacto con Asturias y Cantabria para buscar aliados y demandar medidas efectivas: entre otras la rebaja del precio eléctrico hasta los 35-40 €/ MWh para que nuestra industria pueda competir en igualdad de condiciones con el resto de Europa.